Si estás a punto de disfrutar de tu primera Navidad con un bebé recién nacido, ¡felicitaciones! Sin duda, esto hace que las fiestas navideñas sean aún más especiales.
También puede resultar un poco abrumador pasar por esas noches sin dormir, además de todos los preparativos navideños y la inevitable afluencia de familiares y amigos.
Aquí van algunas ideas para sobrevivir la Navidad con el bebé:
- Si ya tienes una rutina establecida, intenta planificarla lo mejor que puedas: programa la cena de Navidad cuando el bebé suele dormir la siesta para que puedas relajarte y disfrutarla. Puede que no siempre salga como lo habías planeado, pero al menos puedes intentar terminar el postre antes de la siguiente toma.
- Intenta no sobrecargar tu agenda social con visitas a familiares o viajes. Haz que las vacaciones sean lo más relajadas y libres de estrés posible y no temas avisar a la gente en qué horario te conviene más a ti y al bebé para llamar. Nunca has tenido una excusa mejor para decir que no y no sentirte culpable por ello, así que aprovéchala al máximo 🙂
- Puede que te guste la idea de celebrar la Navidad en tu propia casa este año. Puedes mantener al bebé en su propio entorno y estar un poco más relajado, pero recuerda que tendrás que lidiar con las molestias y la presión adicional de recibir a tus invitados. Ir a casa de un familiar puede que no te parezca una mala idea y puede aliviar la presión de tener que hacer malabarismos con la preparación de la cena navideña entre las tomas y los cambios de pañales.
- El lado positivo es que ahora es el momento de comenzar con sus propias tradiciones, ya sea continuar con una tradición familiar de la infancia o comenzar otras nuevas. No tienen que ser nada grandioso, algo simple como una foto festiva junto al árbol que se puede tomar todos los años en el mismo lugar.
- No olvides hacer una pausa, disminuir la velocidad y disfrutar del tiempo juntos en familia, ya sea con muchos paseos agradables o simplemente tiempo juntos en casa.